martes, 18 de noviembre de 2008

juegos mecanicos


Que tal??

Pues un largo fin de semana, en el cual, me di la tarea de llevar a mi hija (líder infantil de las FARC) a algún centro de estos donde hay juegos mecánicos.

Estos eventos por lo regular los realizas con tu familia para que la cosa se ponga más divertida. Siempre es gratificante ver como un miembro de la familia grita, patalea, vomita, se mea, etc. Así que por esta única vez en verdad iba emocionado de ir con mi hermano, cuñada, la ex y los crios.

Todo comenzó como debe comenzar, una salida familiar, con el pie izquierdo.

Al primer lugar que nos paramos para meter a la guerrilla infantil, estaba cerrado por que tenían evento privado. UPS!! Regresemos a la feria de Chapultepec. Al llegar a la feria de Chapultepec, pagar nuestros respectivos boletos e intentar subir al primer juego a los niños. Nos pusieron la primera traba ¡si no pasan el metro diez no no pueden pasar! Mi sobrino media 1.05 y mi hija 1.07, así que que se la pelaron.

En bastantes juegos de ferias locales los dejan pasar a juegos totalmente para grandes. Es mas si hubiera apuestas, hasta apostar, ayer no fue el caso. Yo que pensé que en la feria de Chapultepec, habría irresponsables manejando los juegos, ¡para nada! De hecho, era risorio el hecho de que no los dejaran subir a unas tazas que lo mas que podían lastimar a un niño, era si el niño se caía y quedara debajo de la taza, pero para que esto pasara, tendría que rebasar al menos unos 20 o 30 Km. hr. la velocidad limite que estaba establecida en el juego mas rápido de niños y el juego mas rápido me pareció que eran los caballitos en el carrusel.

Me quedo bastante obvio que los niños no iban a vomitar sobre sus madres, así que solo quedo el latente hecho de que a alguno de los mayores de edad se nos revolviera el estomago y vomitáramos sobre la gente que miraba tras las vallas, ¡pues no! Era tan corta la duración de los juegos, que no te daba tiempo ni siquiera de subirte bien.

Pero le toco el turno a la montaña rusa. La suerte estaba de mi parte ya que mi ex y su hermana se querían subir conmigo, se sentaron delante mío, el carro avanzo hacia la primera sima, se dejo caer, el vértigo no fue tan emocionante, como el haberme agarrado de las colas de caballo que las 2 llevaban ¡glorioso!.. Fue como jalar de un carro romano, al mas puro estilo de la película Benhur con la música de las valquirias de fondo.

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